Bomberos estabilizan el incendio en el Parque Natural del Cap de Creus | Cataluña

Bomberos estabilizan el incendio en el Parque Natural del Cap de Creus |  Cataluña

El incendio en el Parque Natural del Cap de Creus, entre Port de la Selva y Llançà (Girona), se ha estabilizado desde la mañana del domingo. Las optimistas previsiones de los bomberos de la Generalitat se hicieron realidad y las llamas no reaparecieron durante la noche. Las horas nocturnas volvieron a ser decisivas para controlar el incendio que quemó 415 hectáreas de bosque entre viernes y sábado y obligó al desalojo de 350 personas.

La gran mayoría de los residentes que fueron evacuados el viernes pudieron regresar a sus hogares la medianoche pasada. En esta época también se abrió la carretera que une Llançà y El Port de la Selva. Agentes de los Mossos d’Esquadra, la Policía Regional, que bloqueaban la carretera de acceso a El Port de la Selva, dijeron a EL PAÍS este sábado que habían recibido críticas de vecinos que querían volver a casa a pesar del incendio que se encuentra. no apagado. El Ministerio del Interior emitió el sábado varios mensajes advirtiendo que si bien no hubo llamas, el fuego estaba activo por el riesgo de nuevos brotes.

Más información

Controlar el fuego es el próximo objetivo de los bomberos antes de declararlo. Desde el viernes, ochenta tripulaciones de tierra y quince unidades aéreas han participado en la operación. El ataque aéreo fue decisivo porque la geografía montañosa de la zona dificultaba especialmente a los equipos el acceso al suelo. Los bomberos mantendrán a 155 soldados en tierra este domingo con 55 vehículos terrestres. «Es un incendio discontinuo, con un perímetro inestable, y con muchos puntos en el interior donde se debe prestar especial atención», dijo un comunicado del Ministerio del Interior. Para estabilizarlo, indican los bomberos, “se trazará el perímetro y se empaparán los puntos calientes para evitar cualquier recuperación. [del fuego]”.

El director del Parque Natural del Cap de Creus, Ponç Feliu, dijo a este diario que el impacto en esta área protegida fue menor de lo que se podía temer porque las áreas verdes del monte se quemaron más rápidamente para recuperarse. Feliu recordó que en 2000 un incendio quemó 6.000 de las 11.000 hectáreas del parque natural. Feliu advirtió que en la actual fase de riesgo de incendio, está prohibido visitar el parque natural.