Euforia en el PSOE por la salida de Iván Redondo del gobierno | España

Euforia en el PSOE por la salida de Iván Redondo del gobierno |  España
Pedro Sánchez abandona el Congreso con Iván Redondo en 2019.Jaime Villanueva / EL PAÍS

El PSOE ganó la pelea que tuvo con Iván Redondo tres años después de que Pedro Sánchez lo nombrara jefe de gabinete. La reacción a su salida del gobierno es una «euforia» tanto en Ferraz como entre los barones, como lo corroboran las fuentes socialistas de EL PAÍS desde la cúpula federal y desde distintos territorios. En todos los niveles, desde mandos medios hasta alcaldes, secretarios provinciales y presidentes regionales.

El fichaje de Redondo al frente del gabinete tras el éxito de la moción de censura de Mariano Rajoy en 2018 fue recibido con muchas sospechas en el partido debido a sus pasadas actividades con el PP: había sido jefe de gabinete de la presidencia de Consejo de Extremadura, con rango de consejero, con José Antonio Monago (2011-2015) —durante todo este tiempo, el presidente de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, que perdió el Consejo esta legislatura, ha guardado silencio por respeto y lealtad a la partido y gobierno— y también fue decisivo en la llegada de Xavier García Albiol como alcalde de Badalona, ​​después de haber asesorado a Antonio Basagoiti en el País Vasco. Más que un elemento extraño, inmediatamente se le consideró sospechoso por sus servicios a la derecha en los años de atravesar el desierto cuando el PSOE, tras los reveses electorales de 2011, se encontraba en la oposición mientras el PP reinaba en La Moncloa y la mayor parte del Comunidades Autónomas.

La última prueba de la animosidad generalizada que Redondo generó dentro del PSOE llegó en la comisión federal el pasado sábado. Durante las 22 rondas de discursos que se desarrollaron a puerta cerrada en la máxima instancia socialista entre congresos, una voz dijo lo que pensaba prácticamente todo el partido de quien hasta ayer era el hombre fuerte de Sánchez en La Moncloa. “Iván Redondo dice que el presidente lo tiraría por un precipicio, pero por el partido no se tiraría a un foso”, dijo Paco Fuentes, veterano del PSOE de Extremadura, como corroboran una decena de fuentes presentes. Nadie se opuso a la afirmación en cónclave -Redondo acudió a asistir a una comisión federal para sorpresa de todos- que, además, cerró filas con Sánchez y su decisión de indultar a los presos del usted paga. El propio presidente del Gobierno, encargado de elevar a Redondo a su cargo de todopoderoso jefe de Gabinete, lo ignoró este sábado en la comparecencia en la que agradeció la labor de los ministros salientes del Ejecutivo, que citó uno a uno.

La contratación de Óscar López como nuevo jefe de gabinete del Primer Ministro reconcilia al partido con el ejecutivo, coinciden todas las fuentes consultadas. Todas las aristas e impulsos ocultos que existían entre Ferraz y La Moncloa, acumulados sobre todo desde la repetición de las elecciones legislativas de noviembre de 2019, por las que la cúpula del PSOE acusaba a Redondo, desaparecen con el nombramiento del que había sido presidente de Paradores. desde julio de 2018.

Varios presidentes regionales -el PSOE preside nueve comunidades y co-gobierna otras dos- consultados están encantados de tener ahora un interlocutor de partido en una posición especialmente sensible. El pasado apoya a López, quien fue Secretario Organizador entre 2012 y 2014, es decir. Número tres de Alfredo Pérez Rubalcaba cuando tengamos la información. Procedente del colegio José Blanco, al que pertenece Sánchez, su relación con los líderes territoriales es óptima. No tiene nada que ver con el de su predecesor. Con Oscar, pero no solo con él, vuelve el PSOE ”, confía uno de los barones más poderosos. La acumulación de poder que Redondo ha logrado durante los últimos tres años en La Moncloa nunca ha sido asimilada por completo en el PSOE. Desde el momento en que Sánchez lo eligió en lugar de Juan Manuel Serrano, actual presidente de Correos, que en las primarias se mantuvo al lado de Sánchez y fue su jefe de gabinete cuando surgió la oportunidad de la moción de censura para desmantelar Rajoy. Otra de las decisiones más sorprendentes del partido fue el nombramiento de Redondo como secretario del Consejo de Seguridad Nacional. Después de la investidura de enero de 2020, que permitió el primer gobierno de coalición desde la restauración de la democracia, Redondo amplió sus funciones. Apenas había un servicio clave en La Moncloa que no le reportara. Y creció el malestar en el PSOE.

El ascenso de Félix Bolaños, nuevo ministro de la Presidencia, es otra noticia positiva para Ferraz. Hasta el momento, el secretario general de la presidencia, que a diferencia de Redondo es militante del PSOE, se había convertido desde hace más de un año en el principal punto de contacto entre el partido y el Gobierno, a excepción de Sánchez. Su implicación en la actuación del PSOE y su vida orgánica se había incrementado en los últimos meses. Lo demostró en particular durante la campaña para las elecciones de Madrid, durante las que participó en mítines con Adriana Lastra, vicesecretaria general del PSOE y portavoz en el Congreso, con quien mantiene una relación muy sólida. Bolaños también estuvo al final de la campaña del 4-M, donde la ausencia de Redondo fue muy comentada. Dos días después, el PSOE firmó su peor resultado en Madrid tras perder 13 escaños (de 37 a 24) y ser superado por Más Madrid.

Las encuestas de los funcionarios de campaña, que Redondo realizó después del éxito de febrero en las elecciones catalanas, dieron la victoria a la izquierda sobre la derecha con el conteo ya iniciado. El PP aprovechó el triunfo de Isabel Díaz Ayuso para transmitir la idea de que había comenzado un cambio de ciclo. En el PSOE recuerdan que en las elecciones de noviembre de 2019, en las que el PSOE pasó de 123 a 120 diputados, se vendió casi hasta el final que los socialistas tuvieran alrededor de 130 escaños. Los datos internos, por otro lado, advirtieron de un resultado incluso peor que lo sucedido. Porque queda el recuerdo la perplejidad de los responsables del PSOE valenciano que no entendían por qué la penúltima reunión de esta campaña se celebró en Castellón, donde los socialistas no jugaban nada.

Con Redondo fuera de La Moncloa, Sánchez también se rodea de otros perfiles jóvenes y de proyección dentro del PSOE como los de Isabel Rodríguez, nueva ministra de Política Territorial, y Pilar Alegría, de Educación. Una de las interpretaciones que eligen es que se les designe como los sucesores naturales de Emiliano García-Page en Castilla-La Mancha y Javier Lambán en Aragón cuando llegue el momento.