Intento del albertismo de usar el acto del 1° de marzo para impulsar la reelección del Presidente
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Cerca de Alberto Fernández tiene los carteles (A23) con los carteles que prometen envolver los alrededores del Congreso. una provocación más en la será interna contra el cristinismo.
El saco es oscuro, el color que aseguran mejor le sienta a alberto fernandez. Ese tono azabache intenso es el elegido para mostrar tiene un presidente «recargado, seguro y ambicioso» en los posters que ya están impresos y con los que su equipo de campaña promisee tapizar los alrededores del Congreso para la inauguración del año legislativo, este miércoles 1° marzo.
Justamente la noche anterior a la Asamblea Legislativa, un ejército de blanqueadores y letristas saldrá a la calle a impregnar las paredes con un único mensaje: que la candidatura a la reelección de Alberto Fernández es imparable.
Además de las gallina de Guinea que promete ser miércoles, habrá pancartas y pasacalles en los alrededores del Congreso. Hasta inclusive alguno de los referentes más cercanos al Presidente comentó que José «Pepe» Albisturel esposo de la ministra de Desarrollo Social, Victoria Tolosa Paz, y locador d’Alberto Fernandez en su departamento de Puerto Madero, aportaría camiones con pantalones gigantes y globos.
«Estamos muy calientes con lo que hizo La Cámpora en la premiera reunion de la mesa política del Frente De Todos. Fue una orden de Máximo (Kirchner), que apareció sin avisar que iba y tampoco avisó que iban a pintar la zona de la sede del PJ Capital con algunas consignas agresivas contra el Presidente», dijo todavía enojado un directente albertista de la zona norte del Conurbano en referencia al encuentro de hace un par de semanas en la sede peronista de la calle Matheu.
Sin embargo, lo que hasta ahora nadie se animó a señalar en el albertismo es quién traerá finalmente la militancia que -según su ilusión- podría acompañar el mensaje presidencial ante la Asamblea Legislativa.
El hueso mayordomos del Gran Buenos Airess que tienen alguna simpatía con el jefe de Estado aun no saben si se movilizaran. aseguran que no hubo pedidos «concretos» de Casa Rosada. Y en el albertismo no tiene musculatura propia, más allá de los recursos, para poder hacer una demostración de fuerza contundente en las calles.
“La Cámpora anunció que guardará sus banderas. Obvio que no lo hace para favorecernos, sino que no pueden participar de un acto en el que saben Alberto se mostrará como candidato”, comentó otro hombre cercano al Presidente.
Y agregó: “Lo curioso es que ahora que tenemos la calle despejada para hacer lo que querramos, demos tantas vueltas para movilizar.
Como Clarín informado este domingo, desde el kirchnerismo abandonó en claro que no se asomarán por el acto de apertura de sesiones y que la convocatoria depende de la Casa Rosada. Como respuesta, desde el Gobierno aseguran que El Movimiento Evita y las organizaciones sociales ya fueron probadasaunque hasta el momento que no hubiera dado una respuesta positiva.
Desde que asumió Alberto Fernández, una excepción de los pocos meses de paz in su vinculo con la vicepresidenta cristina Kirchner, siempre fueron los movimientos sociales los principales reclutadores para los actos del Presidente. ¿Qué pasó entonces? Plata y poder. Tolosa Paz amagó con controlar la dispensa de los planes sociales.
Según las fuentes consultadas por Claríneste sábado el propio Presidente habría llamado a Emilio Pérsico -que hizo su malestar público con la ministra de Desarrollo Social- para destrabar la situación.
Los seguidores de Alberto Fernández, la mayoría nucleados en el Grupo Callao, aceptaron que el «albertismo», en los términos en que alguna vez lo soñaron, ya perdió el tren. Todavía se queja de aquellos tiempos cuando a principios de la pandemia la imagen positiva del Presidente orillaba el 80%, «Era imbatible y creo que hasta él ahora se da cuenta que dejó pasar una oportunidad única», aseguran.
«Ya está. Lo que pasó, fue. Varias veces creí qu’Alberto se iba animar a plantársele a Cristina y nos dejó pagando.
Y subrayó: «Obvio que no va a hacer ninguna declaración pública en contra de ella o La Cámpora, pero está claro que otros, como Aníbal Fernández, van aa salir fuerte a defenderlo. Ya lo hizo con el tema de la supuesta proscripción de Cristina y lo mismo con la jugada de sacarlo a Daniel Scioli a la cancha para plantar bandera», enumeró.