La pandemia elevó la pobreza en 2020 al nivel más alto desde la Gran Recesión | Economía

La pandemia elevó la pobreza en 2020 al nivel más alto desde la Gran Recesión |  Economía
Un hombre espera en una de las colas para recoger la comida de Caritas en Aluche (Madrid).INMA FLORES / EL PAIS

La pobreza y la desigualdad se fueron corrigiendo paulatinamente en España tras la Gran Recesión que estalló en 2008. Sin embargo, la pandemia y las consecuencias económicas por las severas restricciones impuestas para combatirla han supuesto un grave retroceso. La tasa de pobreza severa bajó en 2020 al 7% de la población, o alrededor de 3,3 millones de personas según la Encuesta de Condiciones de Vida publicada este jueves por el INE. La cifra está muy por encima del 4,7% registrado en 2019 y muy ligeramente por debajo del máximo del 7,1% que se alcanzó en 2014, en el peor momento de la crisis financiera. Medidas públicas como la ERTE y los ayudantes familiares constituyeron un colchón importante que evitó que estas cifras empeoraran ante el cese brusco de actividad.

Más información

El indicador de privación material severa, a diferencia de otros datos que se elaboran con ingresos para 2019, se basa en una encuesta. Según la encuesta del Instituto Nacional de Estadística, que se llevó a cabo en el cuarto trimestre de 2020 y, por tanto, refleja la situación en ese momento, unos 3,3 millones de personas en España se enfrentaban a una situación de grave escasez material, incluso como privación de hasta cuatro necesidades declaradas en una lista de nueve: tienen serias dificultades para llegar a fin de mes (10%, o aproximadamente tres puntos porcentuales más que el año anterior); no tienen capacidad para hacer frente a gastos imprevistos (35,4%, casi dos puntos más que el año anterior); haber sufrido retrasos en el pago de los gastos de la vivienda principal o en las compras a plazos (13,5%, el doble que en 2019); no pueden permitirse ir de vacaciones una semana al año (34,4%, un punto más); no pueden mantener la casa a una temperatura adecuada; no pueden permitirse una comida de carne o pescado cada dos días; no pueden tener coche; un teléfono; una televisión o una lavadora.

Los datos muestran lo que se vio en las llamadas colas de hambre durante la pandemia. Estas cifras hablan de una situación precaria en los hogares pero no brindan información suficiente para indicar los niveles de pobreza extrema, que representan la verdadera pobreza extrema. En cuanto al impacto que ha tenido la pandemia sobre las desigualdades, las cifras públicas de este jueves del INE se refieren a 2019. Hasta la fecha, solo existen estimaciones preliminares elaboradas por el Banco de España y que confirman un fuerte incremento. Según ellos, el 10% con mayores ingresos pasó, con la primera ola, de 5 veces lo que ganaba el 10% más pobre a unas 18 veces. Y con la recuperación que tuvo lugar en el tercer trimestre del año pasado, se ha reducido a 8 veces, todavía muy altos spreads.

Estas cifras se dan a pesar de que el gobierno aprobó el Ingreso Mínimo Vital el año pasado, que tuvo, especialmente al principio, bastantes problemas de implementación. Este instrumento debería contribuir a ampliar los que ya poseían las Comunidades Autónomas y que, en algunos casos, se consideraron insuficientes o poco cubiertos.