La Policía peruana detiene a más de 200 personas para desalojar la principal universidad de Lima de los manifestantes

Un operativo policial en el que sin participación en la Fiscalía de prevención del delito detuvo hoy a 205 personas en la Universidad San Marcos, decana de América, y que aloja desde la semana pasada a organizaciones de Puno que llegaron a la marcha de Lima.

Según informó una fuente policial a ABC, todos han sido llevados por la Dirección contra el Terrorismo y de la Dirección Criminalística a una prisión de la capital peruana en tres autobuses. Antes de su traslado, los detenidos fueron puestos en el suelo y esposados.

La diputada Susel Paredes, del centro, aseguró a este periódico que “él era estudiante de San Marcos, desde la década de 1980 no se vivía un atropello así. Han entró en la residencia universitaria, a los cuartos de las estudiantes mujeres que no tenían nada que ver con los manifestantes. Las han amenazado y sacado de sus cuartos mientras dormían ya todos los han detenido”. “La situación es insostenible, la presidenta Dina Boluarte debe renunciar. Exijo al presidente del Congreso (Jose Williams) que adelante la fecha de la siguiente legislatura a inicios de febrero para iniciar la transición con elecciones a fines del 2023”, concluyóyó.

From the madrugada, the policía ingreso con tanquetas a la universidad y encabezó un operativo en el que no se jó ingresar a los abogados que llegaron a conocer de los sucesos, ni tampoco a la congresista Paredes, ni ya los congresistas de izquierda, Sigrid Bazan , Isabel Paredes y Jaime Quito.

Mientras tanto, en Puno siguen las protestas donde este sábado aparecieron dos personas más con heridas de bala. Hasta la fecha, las protestas han dejado 60 muertos, 580 heridos, y medio millar de detenidos desde diciembre pasado.

El ex procurador, César Azabache, preguntado por ABC, aseguró que “lo que hoy pasó en San Marcos es más que una intervención policial sin fiscalía. Lo qu’il visto es un démbalse de la capacidad de agresión que han acumulado las fuerzas de seguridad. Se ha visto algo similar en determinadas escenas de maltratos registrados por los medios”.

«El gobierno ha lanzado l’idée de que vivimos una guerra interna para potenciar la violencia fuera de Lima y luego contuvo ese abordaje para evitar mas muertes en Lima. Pero creo que no ha cambiado de actitud ni de narrativa. Lo que vimos hoy es un desembalse de esa violencia”, finalizó.