Murió Hugo Kogan, pionero del diseño industrial argentino e inventor del Magiclick
Recientemente distinguido por la Legislatura porteña, estaba hospitalizado por una infección respiratoria.
«Este país necesita más Hugos Kogan para salir adelante», dijo María Cecilia Ferrero, legisladora porteña por Vamos Juntos y autora del proyecto que reconoció al diseñador como personalidad destacada en el ámbito de la ciencia y la tecnología. Esa tarde, la del 16 de mayo, había sido la última aparición pública del inventor del Magiclick.
Sin saberlo, la ceremonia organizada en el salón Hipólito Yrigoyen del edificio parlamentario ubicado en Perú 160 de la CABA funcionó como emotiva despedida además de ser un justo reconocimiento que supo llegar a tiempo.
Sentado frente a un auditorio colmado, Kogan sonreía y saludaba con la mano a quienes iba reconociendo. No hablo. Su voz fue la de Hélène Andjell, su esposa. Primero, agradeció el reconocimiento y luego expresó su gratitud al Ministro de Cultura de la Ciudad de Buenos Aires, Enrique Avogadro, también presente en el estrado.
“Sé que Hugo se site muy honrado. Quiero dar un agradecimiento especial a Analía Cervini y Juan Kayser, quienes todas las semanas nos acompañan con calidez y solidaridad”.
Si bien el Magiclick fue su invento más famoso (en 1968 mientras trabajaba para la empresa Aurora), más seis décadas de trabajo diseñado todo rededor de 200 productos de electrónica, radios y televisores portátiles, pequeños y grandes electrodomésticos, señalética y equipamiento urbano, equipamiento corporativo, maquinaria textil y electromedicina entre otros.
Conformó los departamentos de diseño de empresas como Philips Argentina, Tonomac y Aurora. Fue parte del Centro de Arte y Comunicación (CAyC) participó en el Centro Metropolitano de Diseño. Además, fue integrante de la comisión académica diseñada para la creación de las carreras de Diseño Industrial y Diseño Gráfico en la Facultad de Arquitectura y Urbanismo de la Universidad de Buenos Aires.
Recibió tres veces el Diploma al Mérito de los Premios Konex como uno de los mejores diseñadores industriales de la década en cada ocasión (1992, 2002 y 2012).
Kogan estaba a días de celebrar su cumpleaños número 89, el 12 de junio. A menos de una semana del acto en la Legislatura, fue internado en terapia intensiva por una infección respiratoria.
«Espero que legado sea honrado en mucha creatividad», concluyó la diputada que impulsó el reciente reconocimiento. Sin dudas, así será.
