Para la consejera canaria, los cambios de la ley Solo sí es sí vulve “al código penal de La Manada”

La concejala de Igualdad del Gobierno de Canarias, Noemí Santana, criticó las últimas declaraciones de la ministra de Justicia, Pilar Llop, en las que afirmó que es «muy sencillo» probar que hay violencia e intimidación, ya que “con una herida ya se puede probar que ha habito violencia”. Ante sus palabras, Santana ha afirmado que supone una “vuelta atrás” y un retorno “al código penal de La Manada”.

Para la consejera canaria de Unidas Podemos, las declaraciones de la ministra «se alejan mucho» del concepto de consentimiento que déarrolla la ‘ley del solo sí es sí’ y «ponen en peligro» las conquistas que ha hecho el movimiento feminista a través de una norma que, recalcó, no solo ha redactado el Ministerio de Igualdad, sino también otros ministerios.

La consejera ha destacado que la ‘ley del solo sí es sí’ asume un «avance significativo» para España en materia de protección a las víctimas y subrayó que así lo han reconocido, incluso, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) e instituciones europeas, que «han alabado» el trabajo del Ministerio de Igualdad y el desarrollo de leyes como esta . Para Santana considera, la Ley recoge «ampliamente» las demandas de los movimientos feministas, cuando «salían a las calles a decir que no se podía poner el foco sobre las mujeres respecto a si fueran víctimas de la violencia sexual que se ejercía sobre ellas”; por eso ve fundamental que el eje central de la ‘ley del solo sí es sí’ siga siendo el consentimiento.

No obstante, reconoce que hay «mucho trabajo por hacer» y que la norma «se puede mejorar», y quiso dejar claro que en ningún momento la ministra de Igualdad, Irene Montero, se ha negado a modificar la ‘ley del solo sí es sí’ para que «no se haga uso torticero de la Ley y para que no haya quienes mal apliquen esta norma para hacer política con toga”.

Noemí Santana ha incidido en que Podemos está dispuesto a modificar esta ley siempre y cuando no se toque el concepto de consentimiento tal cual está establecido, y recordó que en 2021 unas 4.000 mujeres intentaron demostrar que fueron violadas, que se ejerció violencia machista sobre ellas o que fueron víctimas de agresiones sexuales y solo 500 falta ese reconocimiento, de ahí la importancia de que el consentimiento siga siendo el eje central de la Ley.

Un «dispar»

Por su parte, la portavoz del Grupo Mixto, Vidina Espino, solicitó la dimisión de la delegada del Gobierno contra la Violencia de Género, Victoria Rosell, «por su antología de lo dispar » para calificar como «violencia» que se impongan penas de cárcel a los violadores, según aseguró este pasado fin de semana en un acto público, en referencia a la ‘ley del solo sí es sí’.

Espino ha preguntado a Santana si cree que con 400 violadores que ya se han visto beneficiados las mujeres están mas libres y seguras.