Pilar Alegría, profesora para aplicar la “ley Celaá” y promover la formación profesional | España

Pilar Alegría, profesora para aplicar la “ley Celaá” y promover la formación profesional |  España
Pilar Alegría, durante una comparecencia como portavoz socialista en el Ayuntamiento de Zaragoza.PSOE

Pilar Alegría (Zaragoza, 1977) responde al perfil de cuatro de los ministros que se incorporan al Ejecutivo como parte de la reforma que llevó a cabo Pedro Sánchez. El delegado del gobierno de Aragón se endureció en la política municipal y autonómica antes de dar el salto al Consejo de Ministros. Anteriormente, fue Ministra de Innovación, Investigación y Universidad del Gobierno Autónomo. Maestro de profesión, en «toda» su carrera en el servicio público «se ha distinguido por su sensibilidad social», opina Pedro Sánchez. La aplicación de Lomloe, la octava reforma educativa desde la restauración de la democracia y más conocida como Ley Celaá, muy disputado por la derecha, será su principal desafío sin dejar de lado el impulso que La Moncloa quiere dar a la Formación Profesional.

Diputada por Zaragoza entre 2008 y 2015, su elección mantiene, como otros nombramientos como los de Óscar López e Isabel Rodríguez, un profundo simbolismo para el PSOE. Y fue la reconciliación del partido, que aún llevaba algunas de las heridas tras abrir el canal en 2016 a la comisión federal lo que derivó en la renuncia de Sánchez. Unas semanas después, los socialistas se abstuvieron de autorizar la investidura de Mariano Rajoy. «Hay que contar con el talento de todo el partido, no solo de una parte», dijo un alto funcionario socialista tras recordar que Alegría había apoyado a Eduardo Madina en las primarias de 2014 y tres años después a Susana Díaz, en la presidencia de Maño, Javier. Lambán.

Más información

Diplomada en Magisterio, especialidad en Educación Primaria, en las elecciones municipales de 2019, fue la candidata más votada a la alcaldía de Zaragoza. Los diez asesores que obtuvo, cuatro más de los que alcanzó el PSOE en 2015, no fueron suficientes antes del acuerdo entre el PP (8), Ciudadanos (6) y Vox (2). La dirección nacional del partido de Albert Rivera truncó el acuerdo que Alegría había hecho con los representantes locales en Ciudadanos. En definitiva, el alcalde elegido fue Jorge Azcón (PP). Ante esta situación, Sánchez decidió nombrarla en febrero del año pasado como delegada del gobierno de Aragón.

Su entrada en el Consejo de Ministros esconde también otro mensaje implícito, ya que posiciona al nuevo ministro de Educación como el gran favorito para suceder a Lambán como secretario general del PSOE de Aragón cuando se produzca ese momento. La vida orgánica no le es desconocida: Alegría ya era secretario organizador de su federación.